La Asociación Estatal de Padres de Familia rechaza de manera enérgica las agresiones que han sufrido los padres y madres de familia, así como la sociedad morelense que ha decidido reabrir las escuelas de educación básica. La violencia no va a resolver el conflicto magisterial que tiene sin educación a nuestros hijos. Ninguna confrontación entre la comunidad educativa abona a remediar la situación que está perjudicando a nuestros hijos.
Los padres de familia no aceptamos que los maestros paristas mantengan cerradas las escuelas, así como tampoco aceptaremos represalias contra nuestros hijos cuando la normalidad regrese a las aulas.
Nuestra Asociación está a favor de que se resuelva este conflicto sindical que tanto nos está afectando, no sólo en el aspecto educativo, sino en todos los ámbitos de la vida social y económica de los morelenses. Sin embargo, los padres de familia ahora estamos siendo amedrentados por agitadores y oportunistas que se escudan dentro del conflicto magisterial para sacar su mejor provecho, sin importarles nuestros hijos.
Como sociedad, reclamamos a quienes nada tienen qué ver en el problema sindical, sean partidos políticos, organizaciones radicales o extranjeros, que se vayan, que saquen las manos y dejen que pueda haber una salida favorable para la educación de los morelenses. El pasado 25 de septiembre, tanto autoridades estatales como quienes dirigen al Movimiento de Maestros estuvieron muy cerca de alcanzar la solución que abría las puertas de las escuelas, pero de un momento para otro, decidieron retractarse y romper las negociaciones.
Ningún morelense se beneficia con alargar este conflicto que ya va en dos meses sin clases. Por ello exigimos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, a sus disidentes que tienen hoy cerradas las escuelas y a los gobiernos Federal y Estatal, a que se sienten a dialogar y resuelvan ya sus diferencias.
Las niñas y niños de Morelos no pueden perder el ciclo escolar por ningún motivo. Mucho menos por un problema sindical.
Gracias.
Adriana Espinosa Velasco
Presidenta de la Asociación Estatal de Padres de Familia
Los padres de familia no aceptamos que los maestros paristas mantengan cerradas las escuelas, así como tampoco aceptaremos represalias contra nuestros hijos cuando la normalidad regrese a las aulas.
Nuestra Asociación está a favor de que se resuelva este conflicto sindical que tanto nos está afectando, no sólo en el aspecto educativo, sino en todos los ámbitos de la vida social y económica de los morelenses. Sin embargo, los padres de familia ahora estamos siendo amedrentados por agitadores y oportunistas que se escudan dentro del conflicto magisterial para sacar su mejor provecho, sin importarles nuestros hijos.
Como sociedad, reclamamos a quienes nada tienen qué ver en el problema sindical, sean partidos políticos, organizaciones radicales o extranjeros, que se vayan, que saquen las manos y dejen que pueda haber una salida favorable para la educación de los morelenses. El pasado 25 de septiembre, tanto autoridades estatales como quienes dirigen al Movimiento de Maestros estuvieron muy cerca de alcanzar la solución que abría las puertas de las escuelas, pero de un momento para otro, decidieron retractarse y romper las negociaciones.
Ningún morelense se beneficia con alargar este conflicto que ya va en dos meses sin clases. Por ello exigimos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, a sus disidentes que tienen hoy cerradas las escuelas y a los gobiernos Federal y Estatal, a que se sienten a dialogar y resuelvan ya sus diferencias.
Las niñas y niños de Morelos no pueden perder el ciclo escolar por ningún motivo. Mucho menos por un problema sindical.
Gracias.
Adriana Espinosa Velasco
Presidenta de la Asociación Estatal de Padres de Familia
